Negros caballos galopan en manada , desbocados , en la oscuridad de una noche sin luna .
Galopan furiosos , frenéticos ,desbocados por el páramo en que se está convirtiendo mi vida , hiriendo , rasgando el yermo suelo que ya olvidó si hubo un tiempo de hierba y frescura , hoy sólo polvo asfixiante , levantando una nube que todo lo envuelve mientras avanzan sin control ,flota y se vuelve a posar para volver a levantarse de nuevo a su paso,destapando con el hollar de sus cascos aquello que pretendo negar , rompiendo una costra endurecida por el tiempo , el viento y el frío y dejando al aire , como sangrantes heridas retazos de una tierra diferente que me gustaría que se mantuviera y que al mismo tiempo se , que se convertirá en cicatriz estéril de desencanto y frustración , de dolor , de dispersión.
Negros caballos azuzados por gritos y por el restallar de un látigo caprichoso que los obliga constantemente a girar y girar sin control a repetir lo andado , a no dejar asentar el suelo que pisan y a aplastar cualquier sombra de vida que se quisiera gestar.
Negros caballos , polvorientos ,famélicos alimentados sólo por alguna mano furtiva que les ofrece alguna brizna de cuando en cuando y cepilla sus enmarañadas crines cuando el látigo descansa.
Páramo , noche , polvo,secos chasquidos , relinchos y sudor.............
Alma atormentada.
